Mientras Mauricio Macri recorta por segunda vez consecutiva los fondos para ampliar el subterráneo y amenaza con disolver la empresa estatal Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), el Gobierno Nacional encara a toda marcha la obra de extensión de la línea E desde Bolívar, su cabecera este desde el 24 de abril de 1966, hasta Retiro.
El proyecto encarado por la Casa Rosada tiene una importancia estratégica fundamental para el tráfico de la Capital. Los primeros atisbos de realización de los trabajos aparecieron en 1994: el contrato de concesión firmado por Carlos Menem con Metrovías S.A estipulaba que la empresa se haría cargo de esta obra. En 1998, se presentó el plan e incluso se llamó a licitación, pero la recesión económica que comenzó entonces hizo que el proyecto quedara postergado. En 2002, la Emergencia Ferroviaria dictada por el gobierno de Eduardo Duhalde transfirió la responsabilidad de esta obra a la Nación, al igual que la construcción del futuro Taller Central de Subterráneos y la modernización de la línea A, esta última finalizada en un 90% dado que resta la remodelación de las estaciones Piedras y Lima.
El 2 de mayo de 2006, el presidente Néstor Kirchner abrió el sobre con la oferta más económica: aquella presentada por Benito Roggio, propietaria del 90 % de las acciones de Metrovías, equivalente a los 210 millones de pesos aportados por el Estado. Pocos meses después, comenzaron los estudios de suelos en varios puntos de la futura traza, que detectaron innumerables interferencias, muchas de ellas insalvables sin cortar el suminstro de servicios públicos vitales al centro de la Capital.
Es la intención del Gobierno nacional que el tramo hasta Correo Central esté listo en 2010, cuando se planea inaugurar en medio de los festejos por el Bicentenario de la Revolución de Mayo. En los últimos días se finalizó la excavación de los pilotes de Correo Central y se comenzó la ejecución de parte de la losa de esta última, en tanto que no se conoce todavía la ubicación exacta de Catalinas y Retiro. Según fuentes extraoficiales, la terminación de la obra hasta Retiro se espera para mediados de 2012, cuando faltará poco más de un año para el Centenario de la línea A.