La empresa ferroviaria chilena Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia (FCAB) pondrá en funcionamiento la primera locomotora a hidrógeno de Sudamérica.
Por el momento, la máquina será utilizada “desde las instalaciones del FCAB en la ciudad hasta el puerto y en maniobras internas“.
La locomotora, desarrollada por la empresa china CRRC Ziyang -la misma empresa que produjo las locomotoras diésel-eléctricas que circulan en el Ferrocarril Belgrano-, cuenta con una potencia total de 1000 kilovatios y está equipada con una batería de gran capacidad y un sistema de almacenamiento de hidrógeno a bordo de 35 MPa.
Además, explicaron desde la carguera, “tiene un diseño liviano, que reduce el peso en aproximadamente 30 toneladas en comparación con las locomotoras de hidrógeno actuales”. La máquina fue “diseñada específicamente” atendiendo a las necesidades y características de “las rutas operativas de FCAB”.
Según se detalló en un comunicado, la empresa “tiene asegurado el suministro de hidrógeno verde” necesario para la operación “y se encuentra en la etapa final de habilitación de las instalaciones necesarias, así como en la capacitación del personal en mantención y operación de las máquinas por parte de sus trabajadores”.
El hito fue destacado por el Ministerio de Energía de Chile, que remarcó que con la incorporación de la locomotora “se avanza en la descarbonización del transporte ferroviario, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero y promoviendo el desarrollo de infraestructuras sostenibles”, según comunicaron en redes sociales.
La locomotora a hidrógeno verde en Chile, abrirá las puertas a una nueva era en la logística y el transporte de Sudamérica⚡️
Con esta iniciativa se avanza en la descarbonización del transporte, reduciendo las emisiones y promoviendo el desarrollo de infraestructuras sostenibles. pic.twitter.com/5n9lYc1eK5
— Ministerio de Energía (@MinEnergia) November 13, 2024
La apuesta de Chile por el ferrocarril
Desde hace años -y más allá de los vaivenes políticos- Chile viene haciendo una apuesta muy importante por la expansión del sistema ferroviario.
Recientemente, la estatal Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) adjudicó una licitación para obras de mejoramiento del ramal San Pedro – Ventanas, utilizado para transportar los productos de exportación de dos principales mineras de la zona centro-sur del país.
Además, la empresa estatal se encuentra desarrollando inversiones muy importantes en el sistema ferroviario de pasajeros.
A principios de este año fue inaugurado el servicio más rápido de Sudamérica, con formaciones que circulan a una velocidad máxima de 160 km/h, y meses después se amplió ese mismo servicio hasta Chillán. Al mismo tiempo, se encuentran en diversas etapas de avance los proyectos para dos futuras líneas de ferrocarril suburbano en Santiago (a Melipilla y a Batuco).
Además, recientemente se anunció la compra de ocho nuevas locomotoras que serán utilizadas en trenes de pasajeros, turísticos, especiales y para necesidades de obras y proyectos. Esto se suma a otra licitación lanzada hace pocas semanas para reforzar infraestructura eléctrica en Concepción.
Chile: quedó inaugurado el servicio entre Santiago y Chillán
Más allá del transporte ferroviario, el país trasandino se encuentra expandiendo el Metro de Santiago. En abril comenzaron las obras de extensión de la línea 6 -que combinará con una de las nuevas líneas ferroviarias suburbanas-, se está construyendo la línea 7, cuyos trenes ya fueron presentados, y se trabaja en los proyectos de las nuevas líneas 8 y 9: el trazado oficial de esta última, que en buena medida reemplazará a un corredor de BRT, ya fue anunciado.
La situación de Chile ofrece un notorio contraste con la realidad argentina. Lejos de apostar por una expansión del sistema, el gobierno tiene paralizados los proyectos de mayor envergadura, y la reciente reactivación de algunas obras solo apunta a aquellas obras que comprometen la seguridad operativa.
En relación al metro, la comparación también pone en desventaja al Subte de Buenos Aires. A pesar de los aumentos tarifarios, la red no tiene en marcha obras de gran trascendencia y el Presupuesto para 2025 no contempla partidas para la extensión de la red. Salvo la refacción de estaciones y la finalización de algunas demoradas obras, las únicas inversiones de importancia son la renovación de la flota de la línea B y el cierre del loop del Premetro.
El Presupuesto porteño para 2025 no prevé obras de extensión del Subte