Finalmente, se retomó el servicio en la línea C del Subte, que se encontraba interrumpido desde minutos antes de las 11 de esta mañana a raíz del desprendimiento de mampostería del túnel de esa línea en el sector afectado por el descarrilamiento y posterior choque de una formación Nagoya, ocurrido en la mañana del pasado viernes.
Pese a que Metrovías desmintió que hubiera existido caída de material, enelSubte accedió a fotografías que muestran restos de desprendimientos de la bóveda del túnel (ver abajo).
La Guardia de Auxilio y Emergencias del GCBA acudió al lugar a primeras horas de la tarde a pedido de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) para evaluar los daños y constatar si efectivamente no había riesgo alguno de derrumbe, como aseguró la concesionaria Metrovías en un comunicado emitido esta mañana.
En un informe técnico, la Guardia de Auxilio aseguró que “no se observan signos que indiquen un peligro de colapso estructural inminente”, aunque aclarando que “la realización de peritajes no responde a las misiones y funciones de esta dirección general”.
La emisión de este informe era exigida por los trabajadores de la línea para volver a prestar servicio en la totalidad del recorrido. Si bien estos habían ofrecido la posibilidad de realizar un servicio corto (sin alcanzar Constitución), dicha alternativa fue rechazada por Metrovías.
Aseguran que una vez que se retome el servicio en su totalidad, la línea circulará con demoras, ya que se está operando con una sola vía en la terminal de Constitución debido a que allí se encuentra estacionada la formación siniestrada el viernes pasado.