La Ciudad de Buenos Aires podría tener un boleto con tarifa especial para estudiantes y trabajadores de la educación de aprobarse en la Legislatura porteña un proyecto presentado por los legisladores de la UCR Claudio Presman y Rubén Campos. Más allá del apoyo legislativo que una iniciativa de este tipo generaría, la dificultad principal con la cual se encuentra el avance del proyecto se centra en el conflicto planteado entre la Nación y la Ciudad por la transferencia de los transportes que prestan servicios exclusivamente en el ámbito porteño.
“Desde la Legislatura podemos crear la figura del boleto estudiantil, pero está en duda cómo podríamos aplicarlo. La Legislatura tiene competencia para legislar sobre algunas cuestiones sobre los subterráneos o los colectivos que circulan exclusivamente en la Ciudad, pero no podemos fijar precios”, comentó a Noticias Urbanas el legislador radical Rubén Campos.
Tras señalar que en el subte “la competencia que antes era del Estado nacional y ahora está en litigio quien es el estado con competencia” en dicho medio de transporte, Campos remarcó que “las competencias están en el aire en el subte y seguirán estándolo también en los colectivos si la Ciudad no acepta el traspaso por la ley del Congreso”.
“Este conflicto entre Ciudad y Nación afecta al debate legislativo porque habría que ver de qué forma se aplica. Está en duda como podríamos aplicar ese boleto estudiantil. Igualmente vamos a poner el proyecto poner en debate en la comisión de Tránsito y Transporte, probablemente pase también por Legislación General y Educación”, explicó Campos. El proyecto no sólo propone crear un boleto especial para estudiantes de todos los niveles, también incluye a docentes y no docentes que cumplen funciones en establecimientos educativos ubicados en territorio porteño. A diferencia del boleto estudiantil de otras jurisdicciones, la iniciativa incluye a alumnos tanto de la educación pública como privada, desde el nivel inicial hasta la universidad, siendo el único requisito tener domicilio en la Ciudad y vivir a más de 10 cuadras de los establecimientos educativos.
“Durante los últimos diez años vimos como aumentaron, de manera exponencial, los subsidios otorgados por la Administración Nacional a distintos servicios públicos entre ellos el transporte. La lógica del otorgamiento de un subsidio debería contemplar el estímulo de determinadas actividades estratégicas y resolver inequidades sociales planteadas por el mercado”, dijo sobre el proyecto Presman, resaltando que “determinados subsidios deben tener carácter universal para evitar caer en el clientelismo político”, y recordando que en Córdoba y Santa Fe “un sistema similar” ya fue implementado.
La iniciativa presentada en el Parlamento porteño respondería al menos en territorio capitalino a un reclamo que realizan hace tiempo los estudiantes de la UBA. “A comienzos de año el Gobierno de Macri decidió retirar los subsidios al subterráneo y aumentar el boleto en un 127%. A su vez, el Gobierno Nacional anunció un futuro aumento en los colectivos y trenes. Frente a esto, como Presidencia de la Federación Universitaria de Buenos Aires consideramos de vital importancia la existencia de un boleto educativo que beneficie tanto a estudiantes como a trabajadores de la educación”, expresó la FUBA al iniciar una campaña por el boleto educativo nacional.
“Más imprescindible se vuelve el boleto educativo para poder estudiar si tenemos en cuenta que, según los datos del censo UBA 2011, 57% de los estudiantes vive de su propio trabajo y el 47% vive fuera de la Capital Federal. En este marco, luego de años de lucha en La Plata se logró aprobar el boleto estudiantil universitario al 50 por ciento de su costo. Hace pocas semanas se anunció en Córdoba un boleto educativo gratuito para estudiantes y trabajadores de la educación de todos los niveles lo que muestra que la propuesta es viable económicamente”, afirmaron los universitarios.
por NU