El 1° de diciembre de 1988 el Subte cumplió su 75° aniversario. Eran tiempos de anhelos y proyectos para la red, que no llegarían a concretarse del todo gracias a las inestables condiciones económicas del país hacia finales de la administración radical.
Tiempos en los que el Subte se aprestaba a recuperar el tiempo perdido luego de décadas de inmovilismo que lo habían llevado a la decadencia entre las preferencias de los usuarios de transporte público. No es casual que el período de gran crecimiento del transporte automotor coincida perfectamente con las décadas de estancamiento del Subterráneo.
En 1988 Subterráneos de Buenos Aires acababa de inaugurar la ampliación de la línea E hasta Plaza de los Virreyes e innovaba con su proyecto de Premetro a Villa Soldati, Lugano y Puente de la Noria. Las líneas E1 y E2 (la primera nunca llegaría a construirse, la segunda jamás se terminó) funcionarían, en teoría, como alimentadoras del tráfico de la línea E.
Había inaugurado -de manera provisoria- la primera estación de la línea D en más de 40 años, Ministro Carranza, mediante la que alcanzaba el Ferrocarril Mitre y había dado inicio a las obras de ampliación de la misma línea bajo la Avenida Cabildo. Modernos coches como los Fiat Materfer y los Premetro Materfer comenzaban a circular por la red, mientras que los Brugeoise eran remozados con carrocerías metálicas en los talleres de Emepa.
Ese año fue el último en el que SBASE operó la red de forma plena. En 1989 la sanción de la Ley de Reforma del Estado establecía que el servicio sería concesionado tarde o temprano. A partir de allí, con SBASE como operadora residual, se inició un período de decadencia que sólo podía detener, se decía, la intervención privada.
Cinco años después, en 1993, el Subte cumplió 80 años, aniversario que pasó desapercibido. SBASE enfrentaba en diciembre de ese año su último mes como operadora de la red y estaban en marcha los preparativos para que Metrovías tomase posesión del sistema, lo que se efectivizó el primer día de 1994.
25 años después del recordado institucional el Subte cumple 100 años. Las celebraciones son esta vez también escasas, pese a la importancia de la fecha. ¿Pero qué ha pasado entre 1988 y hoy? ¿Cómo llega el Subte a este Centenario?
A diferencia de lo que ocurría en 1988, hoy la operadora de la red es una empresa privada, Metrovías, mientras que SBASE se ha reservado para sí el rol de órgano de control de la concesión y de planificación de extensión de la red.
También se ha ganado en kilómetros de extensión: las líneas A, B y D llegan más allá de las que eran sus cabeceras a fines de los 80, mientras que una nueva línea, aún en obra, ha sido habilitada al público en 2007 marcando todo un hito en la historia reciente del Subte.
La flota de las líneas A, B y C ha sido totalmente renovada, mientras que en la línea D dicho objetivo se ha cumplido parcialmente. Los nuevos coches, hay que decirlo, no son mérito de la gestión de la concesionaria sino del Estado que los ha adquirido con dineros públicos.
¿Cuál es el futuro de la red hoy? Aquí las cosas aparecen delineadas con menor claridad. Lo único que aparece hoy en concreto y en marcha son las tres estaciones de la extensión norte de la línea H (Córdoba, Santa Fe y Las Heras). La incertidumbre rodea a la estación Plaza Francia, luego de que la Legislatura aprobara un polémico cambio de traza alterando severamente el recorrido previsto por la ley originalmente.
SBASE ha manifestado intenciones de comenzar en 2015 la construcción de la línea F, entre Constitución y Santa Fe y Callao en primer término, pero hasta el momento no ha habido comunicación oficial al respecto.
